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Eliminación tatuajes
Funcionamiento y proceso eliminación de tatuajes
El láser focaliza su energía en las zonas de la piel donde está alojada la tinta. Tras una adecuada selección de potencia y filtros, se dispara el haz de luz sobre la piel. Las partículas de tinta al absorber la energía explotan, provocando la fragmentación de las cápsulas donde se aloja el pigmento. A partir de aquí, el sistema linfático es el encargado de eliminar todos los pigmentos liberados en el proceso.
Hay que respetar el tiempo de curación y recuperación de los tejidos antes de aplicar la siguiente sesión. Tras este plazo, que no debería ser inferior a dos meses, se podrá realizar otra sesión incrementando la potencia. Cada persona es un mundo y su cuerpo reacciona como tal, pero como norma general, si quieres hacerte un cover, se necesitarán entre 1 y 3 sesiones para dejar la piel lista y volver a tatuar encima (cover up); si quieres una eliminación completa, las sesiones necesarias son inciertas y varían en función del tipo de tatuaje, colores, tipo de piel, sistema linfático, etc. pero, podríamos decir que, para un tatuaje sencillo el número medio de sesiones está en torno al 5.
Pregustas recurrentes: ¿Deja cicatrices? ¿Me quedarán marcas o quemaduras?
La respuesta es NO, siempre que se realice una manipulación adecuada del equipo. Esto es: el láser Ink Hunter Máster Pro, emite un haz de luz tan veloz (6-8 nano segundos) que no da tiempo a que la epidermis absorba suficiente energía y, por tanto, a que los tejidos se quemen.
El ejemplo que mejor ilustra este proceso y que todos hemos hecho en algún momento es: si pasas el dedo rápidamente a través de una llama, no pasa nada, sin embargo, si lo mantenemos nos quemamos.
¿Cuánto tiempo y sesiones necesitamos para eliminar un tatuaje?
Los aspectos a tener en cuenta para acotar el número de sesiones, y de los que depende la velocidad de eliminación, son muy diversos, los podemos clasificar en:
- El tatuaje: la composición de la tinta, su densidad, la antigüedad del mismo, la profundidad a la que está alojado el pigmento y el tipo de color. Es preciso hacer hincapié en que hay colores como el amarillo, el verde o el azul, requieren un número mayor de sesiones, es más, es posible que los resultados obtenidos no sean los esperados.
- El individuo: tipo de piel, edad, zona del cuerpo, el funcionamiento de los sistemas linfático y circulatorio, etc. Cada cuerpo es un mundo, y reacciona de manera única e imprevisible.
- El curado: es importantísimo seguir las indicaciones dadas para el curado, y por ese motivo, realizamos un seguimiento acorde a las necesidades de cada cliente.
- El equipo utilizado: actualmente, en el mercado existe una infinidad de ofertas de láseres de eliminación de tatuajes, la Ink Hunter Máster Pro es una de las máquinas más potentes y novedosas del mercado, en la que se vuelcan todos los conocimientos adquiridos por estos fabricantes a lo largo del tiempo.
- La experiencia del manipulador: ya hace casi quince años que compré la primera máquina de eliminación, y desde entonces, la multitud de tatuajes eliminados me aporta un amplio conocimiento, que me capacita para ajustar los parámetros de la máquina al máximo, y conseguir los mejores resultados en el menor tiempo.
Como veis, las variables son demasiadas como para dar una cifra concreta al número de sesiones y tiempo necesario, pero nos aventuraremos. El número de sesiones también depende del objetivo:
- Cover up: es decir, aclarar el tatuaje original para realizar uno nuevo sobre él. En este caso, habitualmente, se necesitan de 1 a 3 sesiones.
- Eliminación total: las sesiones necesarias son inciertas, pero podríamos decir que, para un tatuaje sencillo el número medio de sesiones está en torno al 4.
En cuanto al tiempo, puedes calcularlo teniendo en cuenta el número de sesiones estimadas y sabiendo que entre sesión y sesión es necesario darle al cuerpo un plazo de descanso y recuperación unos dos meses.
Obviamente, tras una sesión de láser, la piel es más sensible a cualquier tipo de agresión, especialmete a la provocada por la radiación solar, por lo que si se prevé una gran exposición de la zona tratada no es recomendable aplicarlo durante la época estival. Esto no tiene por qué afectar al plazo, si se organizan bien las sesiones. En este caso consúltame para ver la mejor opción.
¿Qué importancia tiene la potencia del láser?
La tiene y mucho. Evidentemente cuanto más potente mejor, ya que ofrece más posibilidades para ajustar la potencia a los requerimientos del estado del tatuaje, quiero decir, conforme avanza el número de sesiones el tatuaje estará cada vez más atenuado, por lo que absorberá menos cantidad de energía pudiendo así aplicar una potencia mayor.
¿Es recomendable una sesión de fototerapia después de la sesión?
La luz fría de la lámpara, con una longitud de onda de 650 nm, estimula la regeneración celular. En mis años de experiencia, he observado que la regeneración epidérmica se acelera con el uso de la lámpara, especialmente en los primeros días.